Los estudios indican que en la mayoría de casos donde hay una hernia discal, hay un desgaste o deterioro previo. Esto significa que, con los consejos correctos y el tratamiento adecuado, podemos, en muchos casos prevenirlas.
Y si ya sufres de una hernia, mediante ajustes quiroprácticos muy precisos, aliviamos la presión sobre el disco intervertebral, devolviendo el buen funcionamiento a la zona, reduciendo la inflamación y el dolor, y previendo futuros daños en los discos espinales.
En Clínica Quiropráctica Golding estamos especializados en el tratamiento de condiciones y patologías relacionadas con la columna vertebral.
La Hernia discal, tanto en la zona lumbar como cervical, es una dolencia muy común hoy en día… debido en muchos casos al sedentarismo, las pantallas y la falta de higiene postural.